Amador Rivas Latorre en el paro, rejuntado y padre de tres hijos. Ha trabajado como empleado de una sucursal bancaria, enterrador de muertos y como barrendero. Durante un tiempo fue presidente de la comunidad tras la dimisión de su vecino Javi. Desde su divorcio con Maite, al enterarse de que su mujer le fue infiel con
Sergio, éste se va un tiempo a vivir al piso de
Leo. En
Nochevieja,
Amador aparece en su casa borracho y semidesnudo y discute con su
ex-mujer, mientras los padres de ella están presentes en la cena, al
coronel le da un infarto y fallece en el hospital.
Poco más tarde, éste es despedido de su puesto de trabajo y se queda en
el paro, pero al tiempo, encuentra una oferta como barrendero. En mayo
de 2011,
Maite
le lleva a juicio para ver quien se queda con la custodio de los niños y
la propiedad familiar, pero éste lo ganó, sin embargo su felicidad se
acaba por completo ya que su madre viene a vivir con ellos en el Bajo A.
Para quitarse a Justi de encima, finge su propio funeral pero finalmente lo acaban descubriendo y Amador se marcha a vivir a
su pueblo.
Volvió a Mirador de montepinar después de que un intento de braguetazo
fracasas, donde se volvió a casar con la Cuqui debido a la riqueza que
aparentaba tener. Ahora esta de Okupa en su antigua casa, después de que
se la embargaran por impago de la hipoteca (debía 16.850€). Sus
principales metas son “pinchar”, tener un descapotable y pasar la mayor
parte del día con sus amigos tomando cañas en el bar.